viernes, 1 de julio de 2011

Arte y Administración (Artículo)



Hola a todos, comparto mi último artículo, publicado hoy en el Diario El Universal, en la Columna Empresarial.

Alejandro Salgado Baldovino.


El Taller de Emprendimiento Cultural fue el escenario de encuentro para algunos estu-diantes de Administración de Empresas de la UTB y un gran portafolio de artistas: artesa-nas, músicos de distintos géneros, mimos, estatuas humanas, bailarines, diseñadores, orfebres y artistas de la calle, específicamente en el módulo de “El Líder y sus tareas”. Mediante pequeñas conferencias ofrecidas por nosotros los estudiantes y un gran ejercicio práctico de dinámicas, se trataron temas co-mo liderazgo, motivación, Responsabilidad Social Empresarial, planeación, organización, entre otros.

Para nosotros como estudiantes de Admi-nistración, fue muy interesante e importante conocer el punto de vista de cada uno de los artistas sobre todos estos temas, que cualquier emprendedor (sin importar su especialidad) debe saber. Una de las grandes conclusiones del encuentro fue precisamente que, para el éxito de cualquier negocio y actividad que se emprenda en la vida, la organización es vital.

En uno de los ejercicios los artistas organi-zados por equipos debían pensar en crear su empresa y construir la estructura organizacio-nal. Sorprendía en algunos grupos la claridad sobre su propio negocio, mientras que a otros fue necesario dirigirlos, pues su discusión gi-raba sobre quién iba a ser el gerente de la em-presa, no sobre pensar primero en la estructu-ra global de la empresa y luego sobre los de-talles de quién realizaría las labores. Enten-dimos la ventaja que los artistas tenían al co-nocer su negocio, también denominado “core business”. Nosotros los administradores co-nocemos la parte general del funcionamiento de una empresa, pero dependiendo de la es-pecialidad o naturaleza de ésta, debemos aprender sobre el negocio, algo que ya conoce quien se dedique a determinada actividad.

Muchos de los artistas quedaron admira-dos al ver que las estructuras organizacionales fueron muy parecidas a las de otras empresas que no se dedican a actividades artísticas y/o culturales (con sus departamentos de admi-nistración, contabilidad, ventas, etc.), que el departamento que marcaba la diferencia entre un organigrama y otro, era el de Producción. En efecto, porque la mayoría de los artistas y las empresas culturales se dedican tanto a la producción como a la comercialización de su producto.

La presentación de las diferentes estructu-ras organizacionales fue muy fructífera, quedó la idea de que cada una de ellas se convirtiera en área de una gran organización cultural. Una organización donde músicos, artesanos, artistas de la calle y todos los mencionados anteriormente estén organizados y constru-yendo bases para un gran proyecto cultural que no sólo los beneficie a ellos, sino a toda la población de la ciudad y a los extranjeros.

Los estudiantes aprendimos a apreciar el trabajo de todos los artistas, nos dieron gran-des lecciones sobre asociatividad, la alianza estratégica entre arte y administración, y que en definitiva, la decisión de llegar a una gran organización cultural depende de la capaci-dad de iniciativa y liderazgo que muestren como equipo, aplicando todo lo que obser-vamos esa semana: la importancia de tomar decisiones, de liderar, de planear, de organi-zar, de las personas, del entorno, de la comu-nicación, del trabajo en equipo y del control.



*Estudiante UTB



alejandros15@hotmail.com

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